A los 72 años, murió María Martha Serra Lima
La popular cantante falleció en las últimas horas en Miami donde permaneció internada en terapia intensiva
La cantante argentina María Martha Serra Lima, que falleció esta madrugada a los 72 años en la ciudad de Miami, fue una de las principales expresiones de la canción romántica con arraigo internacional, habiendo desarrollado una fuerte carrera en Argentina, con repercusiones en Latinoamérica y los Estados Unidos.
Con 46 placas discográficas editadas a lo largo de su carrera en distintos países del continente y más de 400 premios, entre ellos un séxtuple platino por su trabajo en conjunto con el Trío Los Panchos y diversos reconocimientos, entre los que se suma el Konex, Serra Lima fue uno de los pocos nombres de trascendencia que dio la Argentina al bolero.
Asociada a este género, logró convertirse en la década del 80 en una referencia regional de la canción romántica, luego de un promisorio debut en 1978 con su primer álbum, que incluía una versión de “Usted”, que alcanzó el disco de oro y prefiguró la trascendencia pública que tomaría años después.
Nacida el 19 de diciembre en 1944 en Buenos Aires, la grabación de «Dudo lo que pasa (qué es lo que tiene él)», compuesta por Pedro Favini y Rodolfo Garavagno, en el disco “Entre nosotros” en 1980, le otorgó el definitivo salto en el reconocimiento masivo, ubicándose al tope de los ránkings de venta.
A este éxito demoledor sucedió su sociedad con el Trío Los Panchos, que quedó registrada en dos volúmenes titulados “Esencia romántica”, y que estuvo jalonada por infinidad de conciertos en todo el continente, que incluyeron una célebre presentación en 1982 en el Carnegie Hall de Nueva York que la ayudó en su crecimiento comercial internacional.
Este show fue uno de los momentos culminantes de su carrera, y también cuando cantó el Himno Nacional en la previa de la pelea en el hotel Riviera de Las Vegas entre el argentino Juan Domingo “Martillo” Roldán y el norteamericano Marvin Hagler en 1984 por el título mundial Mediano.
“El mejor momento de mi vida fue cuando debuté en Nueva York, pero también me emocionó muchísimo cuando canté el Himno Nacional en una pelea de boxeo, arriba del ring, en Las Vegas”, expresó en una de sus últimas entrevistas.
En 1985 recibió un Premio Konex como una de las mejores cantantes melódicas de Argentina. Sus canciones ya eran entonces verdaderos éxitos en países como Chile, Colombia, México, Puerto Rico, República Dominicana y Venezuela.
Los clásicos de su repertorio eran «A mi manera», «Usted», «Como toda mujer», «Voy a perder la cabeza por tu amor», «La tercera es la vencida», «El sueño imposible», entre tantos otros.
En cuanto a sus gustos, a la hora de elegir repertorio, aclaró en charla con Télam que elegía “autores que le cantan al amor de manera simple, sin poesía rebuscada que el público no acepta. Me gustan mucho Manuel Alejandro, el padre de todos los cantantes románticos y de boleros, y Armando Manzanero», puntualizó.
En noviembre de 1995 confesó haber vivido un intenso romance con Sandro, que el cantante nunca reconoció, y al que dijo haber “seducido” con su voz.
“Realmente estuve muy enamorada de Roberto (por Sandro, de nombre Roberto Sánchez). Vivimos cosas muy lindas juntos, aunque fue un romance de invierno, luego llegó el verano y cada uno se fue a trabajar por su lado y se acabó la pasión y el enamoramiento”, dijo en una entrevista con esta agencia y en otra televisiva.
Entre las particularidades de esa relación, dijo que Sandro “a pesar de su apariencia, en la intimidad era muy tímido, imaginate que tardó tres días en agarrarme la mano”.
Su suceso público se extendió hasta entrados los años noventa. Allí su carrera inició un paulatino declive que la llevó a radicarse en los Estados Unidos.
«Mi historia es como la de todos. He pasado malos y buenos momentos, y puedo decir que mi vida no fue perfecta pues me arrepiento por tantos sacrificios que pasé. Luego todo cambió y vinieron los beneficios», expresó en una de las celebraciones de su trayectoria.
Tuvo tres matrimonios y dos hijos: Patrik y Cecilia Pell Richard, que le dieron varios nietos, siendo su último marido Horacio Pérez Ugido, que fue su manager en los últimos 20 años de carrera.
En 1997 debutó televisivamente, conduciendo por ATC (actual Televisión Pública) el programa “María Martha Internacional”, un ciclo de canción melódica con invitados, entrevistas y humor.
Declarante sin bozal, Serra Lima dijo en distintos reportajes cosas a veces hilarantes, otras graciosas y algunas difíciles de digerir, entre ellas una de 1993 en la que señaló: “»Estoy orgullosa de que me escuchen en los albergues transitorios, porque allí la gente se ama», al tiempo que remarcó que “el bolero es tan cursi y saludable como el amor», en defensa del género al que se abocó en su carrera profesional y muchas veces tildado de «grasa».
En cuestiones políticas, defendió la pena de muerte, se pronunció en contra de la homosexualidad y enemiga del comunismo, al punto de aclarar: “Nunca iría a cantar a Cuba mientras viva Fidel Castro», además de asegurar: “odio al rock”.
Y también se definió como una mujer a la que le gustaba su casa: “Me considero hogareña y romántica, me divierte cantar pero me incomoda la fama. A mí me gusta llegar a mi casa y cocinarle a mi marido”, dijo en una entrevista en 1983.
Del último tramo de su carrera se destaca la presencia, en 2013, en el espectáculo «Las Elegidas», realizado en el Teatro Colón, y en donde cantaron otras voces como Valeria Lynch, Sandra Mihanovich, y Lucía Galán; mientras que el 31 de enero de 2015 se presentó en el Festival de Folclore de Cosquín junto a Los Tucu Tucu, con gran repercusión.
Sobre Miami, donde falleció esta madrugada y donde residía desde hacía varios años dijo que “es la ciudad más linda del mundo; en Buenos Aires no frecuento a casi nadie porque vengo a trabajar. Allá tengo un gran núcleo de amistades, casi todos cantantes argentinos y cubanos.»