El mate, mucho más que una costumbre

Además de representar un ritual, la infusión preferida por los argentinos posee propiedades antioxidantes y se cree que podría resultar beneficiosa para los huesos. En esta nota, todo sobre su consumo, su historia y su presente

Lo hay que ser adivino para saber que si usted está leyendo este artículo en su casa o en la oficina es probable que, en simultáneo, esté disfrutando de un mate. Amargo o dulce, en recipientes de calabaza, madera, vidrio o lata, esta infusión que tanto acompaña a los argentinos tiene hoy su merecido día.

La fecha elegida para celebrar el Día Nacional del Mate representa un homenaje al nacimiento en 1778 de Andrés Guacarí y Artigas, un excomandante general de la provincia de Misiones que fomentó la producción y distribución de la yerba.

Aunque la referencia resulte demasiado lejana, lo cierto es que el hábito de tomar mate se remonta al período previo a la colonización. Los guaraníes lo utilizaban como bebida por considerarlo un ritual. Incluso, la yerba era moneda de cambio en sus trueques con otros pueblos prehispánicos como los incas, los charrúas y los araucanos. Este culto ha trascendido en la historia, convirtiéndose en la infusión preferida de los argentinos, paraguayos y uruguayos.

Tan es así que, según un estudio realizado por el Instituto Nacional de la Yerba Mate, los argentinos compran 256.000 toneladas de yerba por año. Esto representa un consumo per cápita de unos 6,4 kilos anuales. Sin importar zonas geográficas ni clases sociales, la yerba mate está presente en más del 90% de los hogares del país. No obstante, la región donde más se consume es el Litoral, donde alcanza al 99% de las familias, seguido de la región Centro. De esta manera, la yerba es una de las plantas más consumidas en el país.

Según un estudio realizado por el European Journal of Nutrition sobre trece países de tres continentes, los argentinos toman alrededor de 2,300 litros de líquido a diario. Estos números colocan a la Argentina en el tercer puesto de los que más bebida ingieren, detrás de los alemanes, que beben 2,470 litros diarios, y de los británicos, que toman 2,320 litros.

¿Cómo se compone la botella de 2,300 litros argentina? Casi la mitad de los líquidos que tomamos corresponden a bebidas calientes y allí el mate lleva la delantera. Para darse una idea, bebemos 920 ml de infusiones a diario, lo que nos convierte en los segundos del ranking, después del Reino Unido, donde el té inglés se consume en cantidades muy significativas.

Además de representar un gesto de amistad y de encuentro que trasciende edades, se cree que el consumo de mate puede repercutir de manera positiva en la salud ósea. En esto está trabajando actualmente el investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) Lucas Brun, junto con su equipo de especialistas. Los profesionales están analizando los componentes de la yerba que pueden tener efectos positivos sobre los huesos: calcio, fósforo, flúor, polifenoles y cafeína.