Caputo, el ministro que se niega a rendir cuentas
El cuestionado ministro de Finanzas, Luis Caputo, tenía que presentarse la semana pasada en el Congreso, pero pegó el faltazo. Allí, debía rendir cuentas sobre el exponencial crecimiento de la deuda externa y explicar por qué ocultó en sus declaraciones juradas que poseía empresas offshore en paraísos fiscales.
El cuestionado ministro de Finanzas, Luis Caputo, tenía que presentarse la semana pasada en el Congreso, pero pegó el faltazo. Allí, debía rendir cuentas sobre el exponencial crecimiento de la deuda externa y explicar por qué ocultó en sus declaraciones juradas que poseía empresas offshore en paraísos fiscales.
Según se informó, el amigo del Presidente y primo de uno de los principales contratistas del Estado, se está tomando su tiempo para reunir la documentación sobre lo que todavía no puede explicar.
“No fue ni es dueño de Noctua Partners”, insisten en su entorno, en referencia a la administradora de fondos de inversión registrada en los Estados Unidos, pero no declarada por el ministro. Todo pese a que la Comisión Nacional de Valores de Estados Unidos confirmó que, en efecto, Caputo fue dueño de aquella firma hasta poco antes de asumir en la función pública.
El ministro deberá, además, explicar el objetivo y el destino del endeudamiento que ni el INDEC puede negar: según los datos oficiales, creció US$51.782 millones en 2017, lo que significa un alza de la deuda externa de 28,5% con respecto al año anterior. Así, la deuda equivale al 47% del Producto Bruto Interno (PBI), unos cinco puntos más de lo registrado cuando asumió Mauricio Macri.
Caputo había comprometido su presencia en el Congreso para el miércoles de la semana pasada. Ahora, dijo, irá el 4 de abril. Deberá hacerlo con más hojas y más números porque la deuda, de seguro, habrá crecido.