El gato huiña, una especie autóctona en riesgo que no se veía hacía más de una década
Mariel y Daniel Permarini, y sus dos pequeñas hijas, paseaban con su auto por el Circuito Chico del parque municipal Llao Llao, ubicado a 30 km del centro de Bariloche, cuando se les cruzó de forma inesperada un pequeño animal y detuvieron su marcha unos instantes.
Al principio lo confundieron con una ardilla. Hasta lo fotografiaron. Luego entraron en pánico. En realidad se trataba de un ejemplar de gato huiña, una especie de felino autóctono de difícil avistaje –el último reporte registrado data de hace más de 10 años–. En apenas unos segundos, el felino desapareció en el bosque, que aún mostraba restos de la última gran nevada.
Aunque se trató de una situación incómoda, el hallazgo fue considerado «muy valioso» por aquellos que siguen de cerca la situación de la fauna en la zona. La bióloga Valeria Ojeda destacó a medio locales la importancia de que las personas que realizan avistajes de fauna desconocida los reporten a Parques Nacionales o a cualquier otra autoridad ambiental.
Ojeda explicó que el gato huiña es muy difícil de ver porque suele tener una conducta solitaria, mantiene poblaciones de pocos individuos y es muy dependiente de la cobertura boscosa, «lo cual lo ha puesto en situación de amenaza frente a la fragmentación y el reemplazo de los bosques nativos por otras cobertura de suelo, como plantaciones y ciudades».
El Gato Huiña es uno de los felinos silvestres más amenazados de Sudamérica. Está clasificado mundialmente como especie «vulnerable, con tendencia poblacional decreciente».
Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), hay menos de 10.000 ejemplares, con tendencia a disminuir. Además, estimó en apenas 1.000 machos adultos en edad reproductiva.
Ojeda destacó la importancia del hallazgo. «Pone en evidencia el rol del parque Llao Llao en mantener la biodiversidad característica de la región andino patagónica al alcance de visitantes y residentes, así como también en amortiguar los impactos crecientes de la ciudad de Bariloche sobre el parque nacional circundante», concluyó.