“No hubo un Gobierno que haya atropellado al Estado de derecho como el macrismo”
El diputado nacional del Frente de Todos, Leopoldo Moreau, sostuvo que el presunto espionaje ilegal durante la gestión macrista, que investiga la Justicia a partir de una denuncia de la Agencia Federal de Inteligencia, “es un atropello a los ciudadanos en general y al sistema político en su conjunto”.
El titular de la Comisión Bicameral de Fiscalización de Organismos y Actividades de Inteligencia advirtió que esas prácticas de inteligencia tienen que ver con un “intento de amedrentar o disciplinar” a los adversarios políticos.
“Nos preocupó de esta lista no sólo que aparezcan figuras de notoriedad pública sino que haya personas que no la tienen: militantes o dirigentes de menos notoriedad de diversos espacios políticos y sociales”, expuso el legislador de extracción radical, para luego advertir que esto da cuenta de una “precisión mayor en el espionaje”.
“Se vigiló a Nuevo Encuentro, al Frente Grande, a todo el Partido Justicialista de La Matanza y hasta al responsable de una unidad básica de esa ciudad”, enumeró Moreau, para luego indicar que se trata de una “escala superior de espionaje político”.
En declaraciones a Radio Provincia consignó que se trata de “un modelo sistémico que no tiene ningún precedente en la historia de la democracia argentina” y añadió que “es un atropello a los ciudadanos en general y al sistema político en su conjunto”.
Acto seguido, pidió no olvidar que Mauricio Macri “llegó al Gobierno procesado por escuchas ilegales” y consideró que la presunta red de espionaje forma parte de una “lógica mafiosa que cree que el lugarteniente puede estar siempre amenazando o moviendo el piso”.
Entre 2015 y 2019 “se apropió de la AFI un grupo mafioso que actuaba con este tipo de operaciones articuladamente con la mesa judicial del macrismo, una especie de asociación ilícita dedicada a llevar adelante delitos”, disparó el diputado oficialista.
Asimismo, sostuvo que “la AFI, con recursos del Estado, recogía información que usaba para fabricar causas judiciales o torcer la voluntad de testigos falsos. Esa actividad la pasaba a la Justicia -porque la mafia trata de que lo ilegal se transforme en legal- y se extorsionaba jueces o fiscales para que formen parte de ese entramado”
“Esto no acaba ahí, sino que la trilogía mafiosa se completaba con un Banco Central que fugaba 86 mil millones de dólares”, lamentó, para finalmente repudiar que ese accionar lo haya llevado adelante “un Gobierno que decía que actuaba en nombre de la institucionalidad” cuando “no hubo un Gobierno que haya atropellado al Estado de derecho como el macrismo”. (ANDigital)
