Fabrimac cumple 40 años y sigue en expansión
Germán Carnero: “Buscamos crear nuevas unidades de negocios dentro del grupo familiar”
Es una empresa local de raigambre familiar, hoy conducida por la segunda generación. Planes y proyectos en el mediano y largo plazo
La firma Fabrimac nació en el año 1980 como una tornería, fabricando repuestos para locomotoras Fiat en una locación de la calle Belgrano, a escasos metros de la CLYFER.
En el año 1982 se traslada de lugar a donde actualmente posee sus oficinas administrativas y planta industrial, donde a partir de ese momento sumó a su línea de productos equipos para el manejo de graneles sólidos (cintas transportadoras, elevadores a cangilones, transportes a cadena), y ya en el año 1985 comenzó el desarrollo de máquinas de limpieza de granos.
El gerente de la empresa, Germán Carnero, habló con este diario sobre la larga trayectoria de cuatro décadas, la cual fue fundada por su padre Hugo. En esta charla abordó los avatares y oportunidades que tuvo y sigue teniendo Fabrimac desde hace cuarenta años.
“Hemos transcurrido década tras década en distintos procesos del país, con la hiperinflación de los 80, con la convertibilidad, y demás vaivenes macroeconómicos. Nos hemos ido adaptando a los cambios y después de cuarenta años estamos muy bien posicionados en el sector agroindustrial, realizando provisiones en instalaciones portuarias, minerías, aceiteras y en los últimos seis años estamos proveyendo diferentes equipamientos para procesar arenas de fractura en el yacimiento de Vaca Muerta”.
“Estamos muy felices de haber llegado a los cuarenta años; ser empresario PYME en Argentina nunca ha sido fácil. Hemos tenido que sobrellevar está la hiperinflación de finales de los 80, luego llegó la convertibilidad y a su salida en el año 2001 también nos impactó muchísimo, pero con esfuerzo y dedicación salimos también adelante. Los años que vinieron luego no han sido sencillos, pero en nuestro sector, cada 10 años aproximadamente, se dan situaciones de bonanza que nos permiten crecer y ascender algunos escalones”.
Haciendo un repaso de la historia de la firma, Carnero habló del personal y estimó “han pasado arriba de los doscientos colaboradores a lo largo de todo este tiempo y en una época llegamos a tener trabajando entre forma directa e indirecta unas ciento cincuenta personas, allá por los años 1995 y 1999, cuando tuvimos empleados propios y subcontratados”.
Sobre el presente, el gerente indicó “hoy tenemos unas cincuenta personas fijas trabajando con nosotros. Hemos adquirido equipamiento de última tecnología a nivel global en los últimos cinco años como equipos para mecanizado, corte láser de chapas, plegadoras CNC, robots para soldaduras, etc.” y agregó “ además hemos sumado empresas para prestar servicio a FABRIMAC, con una empresa de logística y una empresa de montaje/mantenimiento”.
“En los últimos seis meses hemos puesto en marcha la segunda plegadora de chapas dirigida mediante CNC, y un equipo láser para corte de chapa, de los cuales hay cuatro en el país con las mismas prestaciones; es muy importante porque nos permite tener una muy buena productividad y calidad del producto final, que es lo que siempre nosotros apuntamos”.
Consultado sobre la performance de la empresa local hacia el país y otros destinos del mundo, Carnero expresó “es muy compleja la situación ya que la Argentina no es barata en los costos, con lo cual exportar en el actual contexto casi que no es una alternativa de negocio; hemos exportado en los últimos cinco años solamente hacia países limítrofes pero son negocios puntuales en nichos de mercado muy particulares. Argentina está cara para exportar por lo cual se hace difícil generar negocios en el comercio exterior; creo que tienen que cambiar muchas cosas de raíz para que la Argentina pueda volver a exportar en serio manufactura local”.
“En cuanto a posicionamiento en el mercado local, estamos en el podio de los proveedores de Industria Nacional en equipamiento tanto para OIL & GAS (como yacimientos en Vaca Muerta) como en el manejo de granos proveyendo transportadores, máquinas para limpieza y separación de granos y soluciones integrales para la industria portuaria”.
“Por otro lado, estamos proyectando hacer más inversiones, tratando de terminar las ampliaciones que estamos haciendo en la planta, llevar adelante otros proyectos de inversión para sumar productos y mercados; todo dependerá de cómo se desarrollen las cosas en los próximos meses”.
“Nuestra intención es crear nuevas unidades de negocios dentro del grupo familiar, nuevos proyectos”, aseguró quien está al frente de la firma.
FABRIMAC es una clásica empresa familiar donde los roles de cada integrante de la familia están bien definidos. “En estos momentos estoy al frente Fabrimac; mi hermano mayor Santiago dirige la empresa de Logística y los proyectos agropecuarios; y mi padre, Hugo, es el principal mentor de esta estructura que llevamos orgullosamente adelante”.