Brote de influenza aviar en Río Negro originó el cierre de exportaciones
El vicepresidente de Senasa, el médico veterinario Rodolfo César Acerbi, explicó mediante un comunicado oficial, que la normativa internacional indica que cuando se pierde el estatus de influenza aviar –situación actual de la Argentina-, se debe notificar inmediatamente a la Organización Mundial de la Sanidad Animal.
“Situación que estamos hoy (1 de marzo), a raíz que hemos registrado el primer foco de influenza aviar de características comerciales, no es de traspatio, ni es en aves silvestres”.
Seguidamente agregó que “mientras ocurrieran esos dos escenarios, no perdíamos la calificación de libres, pero si ocurría en el tercer escenario, que es en el ave comercialmente hablando, ya sean ponedoras o parrilleros como lo es en este caso, automáticamente se pierde el estatus”.
“Esto implica que SENASA deja de certificar productos cárnicos, aviares o huevos productos. Independientemente que sabemos que el huevo y la carne no transmiten la enfermedad y que la gente puede seguir consumiéndolos”.
De todos modos, remarcó que “la normativa internacional dice que si tu certificado acordado, en este caso hace más de 10 años con los distintos países, empieza diciendo que Argentina es un país libre de influenza aviar, el hecho de ya no serlo invalida el certificado y automáticamente invalida la posibilidad de exportar”.
Por otra parte, Acerbi indicó que “toda el área internacional del SENASA está teniendo contacto con nuestros consejeros agrícolas, de manera tal de llevar esta información a los servicios veterinarios que compran nuestros productos y de esa manera damos garantías de transparencia y de cuidado en los distintos destinos”.
En otro orden de cosas el funcionario adelantó que se empezará un proceso de negociación con los diferentes países que negocia el país, entre ellos mencionó a China, Europa, Sudáfrica y Arabia Saudita.
El fin de este proceso será para “decirles que por lo menos, todos los productos que son termoprocesado y liofilizados, como son los derivados del huevo o carnes congeladas, puedan seguir produciéndose”.
El organismo nacional se está moviendo con celeridad ante esta circunstancia inesperada, porque además el cierre de exportaciones anticipa una fuerte pérdida de divisas.
La preocupación en este momento es, según señaló Acerbi, que “hoy nos agarra con un porcentaje aproximado de unos mil contenedores viajando en distintos niveles a punto de llegar a destino”.
“Estamos tratando de comenzar en este punto, de que todos estos contenedores que están flotando puedan ingresar perfectamente, después empezaremos en las próximas semanas a tener negociaciones para modificar los modelos de certificados, de manera tal que ya no sea país libre de influenza aviar, sino con otra metodología que nos permita, como le pasa al resto del mundo que ha tenidos casos, mantener este comercio, ya que reitero: la carne y los huevos no transmiten la enfermedad”, completó.
Respecto a la detección de este brote, el segundo de SENASA informó que “toda el are técnica nuestra se ha desplazado a Rio Negro, para poder aislar rápidamente la granja de pollos parrilleros a través de lamentablemente el sacrificio del 100 % de sus aves, su enterramiento y desinfección de camas y galpones, de modo tal que el virus no salga de esa granja y no exteinda por el valle”, puntualizó.
Por ultimo indicó que se comunicó personalmente con la Gobernadora rionegrina, Arabela Carreras, quien “se ha puesto a total disposición. Esperemos que este sea el primero y último de los casos de influenza aviar. Es una epidemia que se ha distribuido por varias provincias, el virus ya es extremadamente agresivo y cualquier debilidad aprovecha para entrar”, concluyó Acerbi. (ANDigital)