Deberá pagar casi 7 millones de dólares por borrar los graffitis de su edificio
En un fallo histórico, un empresario neoyorquino fue obligado a indemnizar a los artistas urbanos que habían pintado las paredes de su propiedad.
El «museo al aire libre más grande del mundo». Así describían a un edificio ubicado en Long Island, Nueva York, cuyos murales estaban cubiertos por las obras de algunos de los graffiteros más famosos del mundo. En 2013 su propietario, Jerry Kolkoff, decidió borrar las pintadas y los artistas lo demandaron. Finalmente un juez decidió que el hombre debe pagar casi 7 millones de dólares para indemnizarlos.
El fallo es histórico y sienta un precedente con respecto al valor artístico del graffiti.
Fue durante los noventas que las paredes del edificio conocido como 5Pointz comenzaron a ser intervenidas. Durante el juicio, los abogados de Kolkoff argumentaron que al ser el dueño de la propiedad tenía derecho a eliminar las pintadas de su pared, pero el juez basó su decisión en la ley «Visual Artists Rights Act», que protege toda clase de arte público «de reconocido valor», aunque se encuentre en los dominios de otra persona.
Según el fallo, al menos de 45 de los de murales merecían protección. «Es una victoria no solo para los graffiteros involucrados en este caso, sino para todos los del país», afirmó Eric Baum, abogado de los demandantes.