Nueve de Julio: un pediatra pegó el portazo y habló de falta de ética en el sistema de salud
El médico se quejó por distintas carencias edilicias y se quedó sin trabajo. «Uno entiende la salud desde otro concepto, como decía Favaloro», dijo con tristeza, al irse del Hospital de Dudignac. Se recibió en La Plata y se formó en el Hospital de Niños
Un tema que sacudió la tranquilidad del pueblo de Dudignac (5000 habitantes, partido de Nueve de Julio) merece la atención y la reflexión de todos. La salud de una comunidad humilde tendrá la baja de un profesional en pediatría como el Dr. José María Giuliodoro (55 años) quien viene soportando situaciones de déficit estructurales en el Hospital Enriqueta.
“Un otoscopio cuesta en el mercado entre $1.400 y $4.000. ¿Se puede tardar 4 meses y dejar a los chicos sin poder revisarles sus oídos por este dinero?”, se preguntó en el aire de radio Eco.
El profesional reiteró que muchas veces le faltaron el respeto y apuntó a que su confesión en su Facebook y en “esta conversación me traerán consecuencias, pero yo debo ser la voz de mucha gente que necesita que estas cosas se solucionen»
“No me merezco esto. Son 30 años, pero a mí no me va a modificar la vida, sino a 400 familias, porque no es cuestión de sacar un pediatra y poner otro, porque la comunicación -entre un colega y una familia- se llama confianza y eso se adquiere en mucho tiempo, aunque uno entiende la salud desde otro concepto, desde la ética, como decía Favaloro”.
Sin embargo, le generó “tristeza” que no lo haya llamado ninguna autoridad y que “por las averiguaciones que he hecho, sé que la decisión es que no trabaje mas en el hospital de Doudignac. Pero no podemos permitir que en un hospital de 5000 habitantes haya un solo otoscopio, con un montón de médicos y 5 mil habitantes”.