Por ley, ampliaron hasta las 23 el horario de venta de bebidas alcohólicas
La venta de bebidas alcohólicas en comercios de la provincia de Buenos Aires se extenderá hasta las 23 horas a partir de este verano y hasta la finalización de las Pascuas, según una ley que fue aprobada esta tarde por el Senado bonaerense.
La norma, que ahora deberá ser promulgada por el Ejecutivo, dispone que entre el 1° de diciembre y la finalización de Semana Santa los comercios podrán vender bebidas alcohólicas hasta las 23, ampliando dos horas el horario habitual de las 21, dispuestas por una ley de 2009.
La iniciativa, que tenía el visto bueno de la gobernadora María Eugenia Vidal, fue presentada en Diputados por Guillermo Castello (Cambiemos) y Alejandra Martínez (Frente Amplio Peronista). En el Senado fue aprobada con el acompañamiento de todos los bloques a excepción de Unidad Ciudadana, que justificó su rechazo al considerar que podría generar mayores niveles de consumo.
La iniciativa extiende la venta de alcohol desde las 10 hasta las 23 entre el 1° de diciembre hasta el último día de Semana Santa. Uno de los autores de la iniciativa, Guillermo Castello, aseguró que «se trata de volver a la redacción original de la ley, que fue modificada en el 2009. Lo que estamos diciendo es que esta restricción horaria afecta sustancialmente a la industria turística, y especialmente a la zona balnearia».
«Los objetivos de la prohibición no se cumplieron porque falló el instrumento: las leyes deben ser razonables, y las que no lo son terminan siendo derogadas por la costumbre. Además, la prohibición generó la venta ilegal, en lugares no habilitados, generando mercado negro, evasión, mafia y corrupción», sostuvo el legislador, quien aseguró que «estas prohibiciones terminan generando pequeños Al Capones (sic)».
En los considerandos de la norma, se indica que «la restricción horaria vigente afecta sustancialmente la industria turística de la provincia, especialmente en ciudades balnearias, en donde el buen clima y el anochecer tardío hacen que los visitantes regresen de jornadas en la playa después de las 21 horas, con lo cual las cenas o salidas nocturnas se realizan casi siempre dentro del horario de prohibición».