El intendente de Chacabuco, cada vez más complicado por el escándalo de los sobreprecios
La Municipalidad de Chacabuco parece complicarse cada vez más en el escándalo de sobreprecios en la compra de luminarias led que denunció la oposición esta semana. Según los datos que aportó el dirigente Federico Bruno, en el distrito se adquirieron 450 lámparas por un total de $4.261.068 podrían haberse comprado por una suma inferior a los 2 millones de pesos.
Enterada de la denuncia, la municipalidad emitió un tibio comunicado en el que ratificó su “alianza estratégica” con la Cooperativa Eléctrica local, que ejecutó la obra, y afirmó que “los precios abonados por dichas tareas (…) fueron oportunamente verificados y concuerdan con valores de mercado al momento de la contratación”. Además, indicó que “existe una gran diversidad de precios en el mercado de luminarias Led debido a la calidad, procedencia y diversas cuestiones técnicas que deben ser evaluadas técnicamente”.
Más tarde, el propio intendente, Víctor Aiola, emprendió personalmente la defensa de su gestión, aunque en otros términos. Primero, se despegó de la cooperativa, que, dijo, está manejada por sectores de la oposición, y le atribuyó exclusivamente la decisión de comprarle las luces al Hidalgos Group. “Fíjense y pidan la boleta, vean a nombre de quién está”, repitió.
Además, en una extravagancia discursiva, dijo que “puede ser” que la comuna le pueda “haber sugerido” que esa empresa proveyera las lámparas, aunque “actuando con el principio de buena fe” y mediando la promesa de que “iba a instalarse en nuestra ciudad e iba a dar 200 puestos de trabajo”. La firma, vale aclarar, nunca se instaló en Chacabuco, a pesar de que compró lotes en el parque industrial local y realizó movimientos de suelo, siempre según las denuncias de la oposición.
Si bien es cierto que la boleta de compra está a nombre de la Cooperativa, también lo es que el contrato de obra que difundió Bruno entre la Comuna y ese ente incluye, en su parte segunda, una especificación que no deja lugar a dudas. “Asimismo, se instalará en cada columna un artefacto de iluminación del tipo LED de 60 W de potencia -6000 lúmenes de emisión del tipo- marca ORION”, se lee en el documento.
El Secretario de Gobierno y Hacienda, Mariano Cámera, agrandó el margen de dudas, cuando admitió, en declaraciones a La Posta de Chacabuco, que “le presentamos a la Cooperativa Eléctrica como un posible vendedor a la empresa Hidalgo’s”. Pero fue más allá: aceptó, además, que “lo hemos presentado en otros municipios, porque parte del convenio de colaboración que el Municipio firmó con Hidalgo’s era abrirle puertas en posibles compradores”. O sea que el Municipio hacía “lobby” a favor de una empresa privada.
Además de los papeles, Aiola sufrió un revés discursivo de parte del Presidente de la Cooperativa, Ricardo Ciminelli, quien le dijo al portal Chacabuco en Red que fue el municipio el adquiriente de los aparatos. “Cuando nos proponen hacer la instalación de las 450 luminarias LED son muy claros sobre el particular cuando afirman que ellos aportaban las 450 luminarias porque tenían una empresa que era la que les iba a proveer”, declaró.
“No teníamos problema en que el Municipio aportara esas luminarias y nosotros poníamos el resto de la obra; es decir la adquisición de las columnas, los brazos y la mano de obra”, narró, y explicó incluso por qué la factura aparece a nombre de la cooperativa. “Técnicamente paga la Cooperativa en la buena fe para tratar de simplificarle los pasos al municipio y dar comienzo a la obra con mayor rapidez. De hecho las 450 luminarias fueron depositadas en el corralón municipal”, agregó, complicando más las explicaciones del intendente, que se limitó a mostrar todo su enojo por lo que considera una campaña en su contra.
