Actualidad

Kicillof bajó un proyecto de ley sobre combustibles

Las federaciones de combustibles advirtieron al Gobernador que el proyecto perjudicaría a 1.230 estaciones de servicios, y a las demás petroleras.

La Provincia dio de baja el proyecto de ley que impulsó en la Legislatura Bonaerense el diputado del Frente de Todos, Facundo Tignanelli, en el que se pedía que los autos oficiales de los organismos estatales carguen combustible y lubricantes sólo en las estaciones de servicio YPF.

Así lo pidieron representantes de la Federación de Entidades de Combustibles (FEC), y desde la Federación de Empresarios de Combustibles de la República Argentina (FECRA) en una reunión que mantuvieron ayer con el gobernador Axel Kicillof, donde alertaron que si la ley avanzaba en la legislatura, 1.230 estaciones de servicios se verían perjudicadas ya que comercializan otras líneas de combustibles.

Las federaciones de combustibles advirtieron al Gobernador que el proyecto perjudicaría a 1.230 estaciones de servicios, y a las demás petroleras.

La Provincia dio de baja el proyecto de ley que impulsó en la Legislatura Bonaerense el diputado del Frente de Todos, Facundo Tignanelli, en el que se pedía que los autos oficiales de los organismos estatales carguen combustible y lubricantes sólo en las estaciones de servicio YPF.

Así lo pidieron representantes de la Federación de Entidades de Combustibles (FEC), y desde la Federación de Empresarios de Combustibles de la República Argentina (FECRA) en una reunión que mantuvieron ayer con el gobernador Axel Kicillof, donde alertaron que si la ley avanzaba en la legislatura, 1.230 estaciones de servicios se verían perjudicadas ya que comercializan otras líneas de combustibles.

TE PUEDE INTERESAR

En Campana

Fernández y Kicillof inauguraron la refinería de Axion: “Es un símbolo de lo que somos capaces de hacer en tiempos difíciles”

«Pusimos en aviso al Gobernador pidiéndole que no avance la ley provincial para que los vehículos oficiales únicamente carguen en YPF», dijo el titular de FEC, Carlos Alonso. Kicillof les garantizó que daría de baja el proyecto. Desde las federaciones de combustibles indicaron que la semana próxima volverán a reunirse y elevarán una contrapropuesta que abarque a todos los expendedores de las diferentes marcas comerciales.

«Le manifestamos nuestra intención que la venta a entes oficiales sea repartida proporcionalmente entre todas las estaciones de servicio y de todas las marcas, para que ninguna quede afuera y la solución sea inclusiva», señalaron desde FEC en un comunicado. De la reunión también participaron Gastón Ghioni, subsecretario de Energía de la Provincia; Carlos Acuña, Secretario General de la CGT y Vicente Impieri, Presidente de FECRA.

El proyecto había sorprendido a las empresas petroleras, que mantienen una relación cercana y cordial con Kicillof. En marzo, durante la apertura de sesiones ordinarias de la Legislatura Bonaerense, el Gobernador había ratificado que avanzaría con el pedido para declarar a Buenos Aires «provincia petrolera». “El petróleo crudo se produce en diez provincias de la Argentina, pero el 80% del petróleo se destila en la provincia, sale por los puertos lo que se exporta y es necesario encontrar un papel. Buenos Aires es socia del desarrollo de Vaca Muerta”, sostuvo entonces el Gobernador.

Hace poco más de dos semanas, además, Kicillof visitó la planta de Raízen en Dock Sud. La petrolera brasileña anunció inversiones por U$D 715 millones, que son vitales para la emergencia económica y financiera que vive la Provincia. «Es fundamental que el petróleo no sea extraído y exportado inmediatamente, sino que sea elaborado, procesado y convertido con el trabajo y la industria nacional», había dicho el Gobernador en la presentación. De esa manera, ponderó el rol de Buenos Aires como la provincia de las refinerías. Si avanzaba el proyecto en la legislatura, Raízen sería junto con Axion -que invirtió otros U$D1.500 millones en la planta de Campana- alguna de las empresas perjudicadas por el proyecto, en benficio de YPF.

Tignanelli había justificado su proyecto en que «canalizar el poder de compra del Estado hacia un ente de naturaleza púbica implica también economía en los recursos y una apuesta al crecimiento de un sector estratégico para el desarrollo económico que necesitamos, en un proceso de reconstrucción de la producción, la industria y el consumo, devastados por el neoliberalismo». Según pudo saber este medio, el legislador no puso reparos y tras una conversación con Kicillof, entendió el pedido del Gobernador y dio de baja su iniciativa.

«Pusimos en aviso al Gobernador pidiéndole que no avance la ley provincial para que los vehículos oficiales únicamente carguen en YPF», dijo el titular de FEC, Carlos Alonso. Kicillof les garantizó que daría de baja el proyecto. Desde las federaciones de combustibles indicaron que la semana próxima volverán a reunirse y elevarán una contrapropuesta que abarque a todos los expendedores de las diferentes marcas comerciales.

«Le manifestamos nuestra intención que la venta a entes oficiales sea repartida proporcionalmente entre todas las estaciones de servicio y de todas las marcas, para que ninguna quede afuera y la solución sea inclusiva», señalaron desde FEC en un comunicado. De la reunión también participaron Gastón Ghioni, subsecretario de Energía de la Provincia; Carlos Acuña, Secretario General de la CGT y Vicente Impieri, Presidente de FECRA.

El proyecto había sorprendido a las empresas petroleras, que mantienen una relación cercana y cordial con Kicillof. En marzo, durante la apertura de sesiones ordinarias de la Legislatura Bonaerense, el Gobernador había ratificado que avanzaría con el pedido para declarar a Buenos Aires «provincia petrolera». “El petróleo crudo se produce en diez provincias de la Argentina, pero el 80% del petróleo se destila en la provincia, sale por los puertos lo que se exporta y es necesario encontrar un papel. Buenos Aires es socia del desarrollo de Vaca Muerta”, sostuvo entonces el Gobernador.

Hace poco más de dos semanas, además, Kicillof visitó la planta de Raízen en Dock Sud. La petrolera brasileña anunció inversiones por U$D 715 millones, que son vitales para la emergencia económica y financiera que vive la Provincia. «Es fundamental que el petróleo no sea extraído y exportado inmediatamente, sino que sea elaborado, procesado y convertido con el trabajo y la industria nacional», había dicho el Gobernador en la presentación. De esa manera, ponderó el rol de Buenos Aires como la provincia de las refinerías. Si avanzaba el proyecto en la legislatura, Raízen sería junto con Axion -que invirtió otros U$D1.500 millones en la planta de Campana- alguna de las empresas perjudicadas por el proyecto, en benficio de YPF.

Tignanelli había justificado su proyecto en que «canalizar el poder de compra del Estado hacia un ente de naturaleza púbica implica también economía en los recursos y una apuesta al crecimiento de un sector estratégico para el desarrollo económico que necesitamos, en un proceso de reconstrucción de la producción, la industria y el consumo, devastados por el neoliberalismo». Según pudo saber este medio, el legislador no puso reparos y tras una conversación con Kicillof, entendió el pedido del Gobernador y dio de baja su iniciativa.